LOS PRINCIPIOS A VECES NO SON FÁCILES

A principios de un nuevo curso, los niños están algo perdidos. Después del periodo vacacional de verano siempre cuesta retomar las rutinas: levantarse temprano, permanecer en el colegio cinco horas, las actividades extraescolares, las tareas, las tablas, repasar inglés, la introducción de nuevo idioma : francés, además de conocer a los nuevos compañeros y a la nueva maestra y sus normas...

 Son muchas cosas que se acumulan a la vez y todos no saben reaccionar ante tantos elementos externos que acontecen a su alrededor. Alguno se acostumbran a todos los nuevos hábitos, otros lo van digiriendo más lentamente y hay algunos rezagados que se niegan a adaptarse pero finalmente, no les queda más remedio ya que se repite la rutina día tras día.  

Para que los niños vayan felices a la escuela y tengan éxito personal, deben sentirse realizados, sentir que cada día mejoran... Ya sabemos que si una persona no se siente bien en el lugar donde está, no querrá estar allí. Esto le pasa mucho a los niños. Pero también deben saber lo que es la FRUSTRACIÓN, APRENDER DE LOS ERRORES, EMPATIZAR CON LOS DEMÁS, COMPARTIR...

Sé por experiencia que el comienzo de curso y el cambio de 2º a 3º de Primaria es un salto bastante grande. Pero en estas edades es donde se forja la personalidad, las amistades, los valores... Desde el colegio y desde casa hay que inculcarles valores como la RESPONSABILIDAD, PUNTUALIDAD, SINCERIDAD... valorar mucho mucho el ESFUERZO. Al principio es complicado y el camino está lleno de obstáculos aún así es AHORA cuando hay que estar encima de ellos tanto diciéndole lo que no hacen bien y enseñándoles cómo se hace como reforzando muchísimo las cosas que hagan bien. Ellos verán que si trabajan bien y se esfuerzan , poco a poco obtendrán sus frutos, se sentirán más cómodos, confiarán en ellos mismos. El REFUERZO POSITIVO es algo que da más resultados que los castigos. 

Por favor, un consejo que os doy desde mi humilde experiencia es que NO LE HAGÁIS LAS TAREAS, NO LE PREPARÉIS LA MALETA... de este modo los hacemos inútiles, ellos observan lo bien que las mamás y papás hacéis su trabajo porque ellos no saben hacerlos. Pero si supervisáis lo que hacen, si los animáis cuando lo hagan bien, ellos se sentirán mejor y verán que son CAPACES de cualquier reto. A veces fracasarán como a todos nos ha pasado alguna vez, pero cuando lo consigan será un logro que les dará mucha satisfacción.